El Patrimonio Arquitectónico de cualquier lugar es sin duda una fuente de riqueza muy importante que nos da la oportunidad de identificarnos con nuestros orígenes, nuestra historia y, en definitiva, nuestra cultura. Mantenerlo y conservarlo es una gran responsabilidad para transmitirlo a las generaciones venideras, pero también una ocasión ideal para disfrutarlo y utilizarlo en el presente.


En los tiempos difíciles en que nos encontramos, mantener el Patrimonio se hace una tarea ardua y complicada. Por ello, es de vital importancia que restauremos estos edificios a tiempo, antes de que se conviertan en ruinas irrecuperables. Apostamos firmemente por la Restauración del Patrimonio Arquitectónico, que debe usarse y reinventarse para ser útil a la sociedad actual y que de esta manera pueda ser sostenible generando ingresos que ayuden a su mantenimiento y conservación.